Desde la Agitprop hasta el uso de TikTok
Agitación, propaganda y TikTok. La comunicación política ha experimentado diversas técnicas en el último siglo, siempre con el mismo objetivo: la persuasión del votante.
Cada época histórica tiene un contexto, y para entender dicha época debemos entender primero ese contexto. En los últimos cien años el mundo ha sido testigo de miles de cambios en todos los ámbitos, y la comunicación política no se libra de esa evolución. A medida que han avanzado los años, la forma de comunicar ha ido evolucionando y lo que hoy no nos es extraño lo verían como una necedad un tiempo atrás. Este artículo trata de analizar la evolución de la comunicación política partiendo de las técnicas empleadas en la Unión Soviética hasta el manejo de TikTok como otra herramienta comunicativa.
Nuestro día a día avanza a un ritmo vertiginoso, y así viene siendo últimamente, pero para entender el hoy tenemos que mirar al ayer. La política, y de igual forma la comunicación política, no es ajena a estos cambios. Analicemos entonces la diferencia entre la comunicación política en los inicios de la Unión Soviética y la comunicación política de hoy.
Agitación y propaganda
El término agitprop es la contracción de dos palabras: agitación y propaganda. Se trata de una estrategia de comunicación política difundida a través del arte, la literatura, el cine o el teatro. Son muy característicos los ejemplos de este tipo de comunicación, pero antes de ver alguno de ellos, ahondemos en él. Hablamos de la combinación de difundir un ideario y el llamamiento a la acción de los ciudadanos. Aunque con el paso de los años la agitprop se expandió por todo el mundo, tiene sus orígenes en la Unión Soviética. Tras la revolución de octubre del año 1917, y una vez con los bolcheviques ya instalados en el poder, había que hacer llegar la ideología comunista a todo el país.
Tras la revolución rusa, el Partido Comunista liderado por Lenin creó un departamento de agitación, cuya misión era emplear el arte y la cultura como medio de propaganda. ¿Cómo se llevó a cabo esta estrategia de comunicación? La masificación fue la clave; consiguieron llegar a todos los ciudadanos de la Rusia postrevolución, transmitiendo así el ideario de la Unión Soviética desde las clases trabajadoras hasta las familias de origen burgués. Kevin Brown, profesor de la Universidad Wesleyan de Illinois, destaca que dicha propaganda podía encontrase en cualquier lado: “En toda la Unión Soviética, la propaganda podía verse por todas partes, desde galerías de arte hasta en películas o en cada esquina, la cultura rusa estaba inundada de sentimientos pro-bolcheviques”.
Cabe decir, que la estrategia de comunicación política que nos concierne tuvo su máxima expresión y esplendor en el teatro, accesible para todas las clases sociales. Esto se debe a una sencilla explicación: el teatro era capaz de comunicarse directamente con las masas. Fue tal el éxito de la agitprop en general, y del teatro en particular, que, desde el departamento de agitación citado antes, afirmaban lo siguiente: “La cultura es sólo una forma de propaganda, y la propaganda es la forma más elevada de la cultura”. Veamos algunos ejemplos de esta práctica en la Unión Soviética.
Tres ejemplos, tres diferentes temas, pero siempre con el mismo objetivo de agitar a la población tras la Revolución de octubre. No es baladí que los tres ejemplos provengan del mismo sitio. De hecho, Gosizdat fue la primera editorial a gran escala controlada por el Estado. Esta se fundó en 1920 tras la fusión de varias editoriales, con el propósito de agrupar las imprentas y editoriales del país en una sola institución. Además de editar sus propias publicaciones, Gosizdat era responsable de elaborar un plan editorial unificado, dirigir otras editoriales, supervisar la distribución de libros y planificar la producción de papel. Aunque existía con cierta independencia del gobierno, en 1930 Gosizdat sirvió de base para la creación del conglomerado editorial estatal Ogiz (Asociación de Editoriales Estatales) que unió todas las publicaciones bajo control estatal.
Esta manera de transmitir los mensajes se expandió rápidamente por el viejo continente, y más tarde llegó a hasta todos los rincones del mundo. La propaganda nazi, por ejemplo, tiene su origen en la agitprop, aunque desarrolló sus propias técnicas de persuasión. En la España de principios de los años 30 y durante la Guerra Civil podemos encontrar numerosos ejemplos muy ricos, con evidente influencia del modelo soviético. Los numerosos grupos de teatro que durante la Guerra Civil fueron agitadores de masas son ejemplo son el mejor ejemplo. Cabe destacar el grupo de teatro La Barraca que fue una de las máximas expresiones de la agitprop durante los años de la segunda república.
TikTok y la era de la instantaneidad
Hagamos un salto en el tiempo; un siglo después de la revolución en Rusia, las redes sociales empiezan a ser herramientas e instrumentos utilizados por todo aquel agente participe en la comunicación dado a su alcance. Barack Obama fue pionero en el uso de las redes sociales y gracias a la campaña realizada en estas en 2008 consiguió ser presidente de los Estados Unidos. Nada más y nada menos. Redes sociales y presidencia de los Estados Unidos. Entonces, habrá que poner el foco del análisis en estas, ¿verdad?
Pese al éxito de Obama, algunos políticos se han mostrado escépticos al uso de este tipo de herramientas hasta hace poco tiempo. Twitter (ahora X) es el instrumento preferido por los políticos y se ha convertido en un espacio donde la política es un tema recurrente. Podríamos definir Twitter como un tablero político donde los políticos trasmiten sus mensajes e ideas activamente. Pero, en el acelerado cambio constante del que somos participes, una red social está adquiriendo importancia: TikTok.
Uno de los principales problemas de los partidos políticos de hoy en día es la difícil tarea de conectar con lo más jóvenes. Dicho de otra manera, la desafección de los más jóvenes respecto a la política es una evidencia. ¿Por qué ocurre esto? Actualmente vivimos en una época que se caracteriza por el constante cambio, y esto también afecta al panorama político. La crisis climática, la primera guerra en suelo europeo en el siglo XXI, la pandemia del Covid-19, la inflación o el auge de movimientos populistas de ultraderecha son algunos temas que marcan la agenda política. La juventud es consciente de estos problemas, en cambio, el desafío está en el cómo: ¿cómo acercar a los jóvenes a la política?
Los jóvenes están concienciados con las problemáticas mencionadas, básicamente, porque de ellas dependen en gran medida su futuro. El problema radica en la forma de comunicación y en la complejidad de colocar mensajes concretos y eficaces en un tiempo muy limitado. En TikTok, los videos duran en torno a un minuto, pero la capacidad de atención de los usuarios es todavía menor. El scroll es el eterno enemigo, y a él tendrán que hacer frente los equipos de comunicación para conseguir que los usuarios mantengan la atención en el video del político. Es decir, estamos ante un verdadero reto. Y el reto se debe afrontar en la plataforma donde las personas de entre 18 y 24 años representan casi el 40% de la audiencia de la plataforma, con 420 millones de usuarios dentro de este rango de edad, según un estudio realizado por Influencity.
En la actualidad, tener una presencia política en TikTok es una estrategia clave. Las redes sociales se han vuelto fundamentales en la comunicación política, ofreciendo una plataforma para llegar a un público amplio y joven. TikTok es una red social masificada y este hecho la convierte en un instrumento perfecto para la colocación de mensajes entre el público más joven. Algunos políticos de gran importancia ya utilizan esta plataforma de manera eficaz, siendo los políticos de Latinoamérica pioneros en esta cuestión. El reciente reelegido presidente de El Salvador, Nayib Bukele, es uno de esos pioneros. Bukele conocido por sus políticas contra las maras, se ha valido de TikTok para visibilizar dichas políticas y para sacar reedito político. El presidente de El Salvador tiene casi 8 millones de seguidores, 65 millones de Me gustas y los videos tienen cerca de un millón de reproducciones, aunque los más virales superan esa cifra y algún video contiene hasta más de 3 millones de visualizaciones. Una vez analizado los datos, parece que Bukele le saca reedito político a TikTok, ¿verdad?
Otro ejemplo de buenas prácticas de comunicación política en TikTok es la campaña realizada por los libertarios en las elecciones presidenciales de Argentina. Desde la cuenta oficial de Javier Milei, se realizó un seguimiento de la campaña del candidato, subiendo a la plataforma principalmente recortes de entrevistas en televisión y radio y recortes de discursos. Además, las cuentas no oficiales de la candidatura La Libertad Avanza también publicaron videos de Milei en los medios de comunicación que ayudó a la colocación de los mensajes y a la creación de una comunidad en la plataforma.
Cruzando el charco hacia Europa, Emmanuel Macron, presidente de Francia, supera los 4 millones de seguidores en TikTok. Macron apuesta habitualmente por el video-selfie, estrategia que sirve para darle importancia a su persona. Además, videos en encuentros públicos para mostrar cercanía con los ciudadanos o recortes de discursos para la colocación de mensajes concretos son otras estrategias empleadas por el equipo de Macron.
Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra del Gobierno de España, también hace uso de TikTok para la difusión de las políticas y propuestas de Sumar. Los números están lejos de los ejemplos citados anteriormente, ya que no estamos ante el mismo estatus, pero es interesante el uso que le da el equipo de Yolanda Díaz a la red social en cuestión. Las intervenciones de Díaz en el Congreso de los Diputados tienen su espacio, acompañados de subtítulos para mejorar la experiencia del usuario y facilitar la comprensión. En el perfil de Diaz las intervenciones en medios de comunicación, desde apariciones en late night shows hasta declaraciones en medios más formales, son comunes con el objetivo de trasmitir una imagen cercana de la política. Otro elemento que destacar son los videos donde Díaz aparece en primer plano, otorgando así más importancia a la propia persona e imagen que a las políticas.
La cuenta oficial de Santiago Abascal, en cambio, se caracteriza por la cantidad de recortes de discursos. Prácticamente la mayoría de las publicaciones son cortes de discursos, en el Congreso de los Diputados o en mítines y actos políticos. Además, ha sido publicada alguna intervención en los medios de comunicación, siendo el tono muy directo. Los videos, mayoritariamente, están acompañados por subtítulos como en el caso de Bukele o Díaz.
Esto no pretende ser un manual de buenas prácticas, sino unos consejos a la hora de utilizar TikTok:
El video debe ser ágil.
Sencillo y directo: cuanto más nos enredemos peor, hay que recordar que el tiempo de atención de los usuarios es limitado.
Dinámico: podemos utilizar diversos recursos visuales (imágenes, gráficos, noticias, etc.) para dinamizar el video.
Subtitulado: esta técnica ayuda a mantener la concentración y a entender el mensaje.
Para tener en cuenta: cuidado con los efectos, el volumen de la música, el lenguaje corporal (si no es necesario bailar, no se baila) y el tono.
Está claro que las formas de comunicación política evolucionan a una velocidad vertiginosa, y los profesionales de esta materia tienen que adaptarse a dichos cambios y tendencias. Las sociedades de los primeros años del siglo XX y las de ahora son muy diferentes, y las técnicas de comunicación política también lo son. En este texto se ha estudiado como la agitprop trataba mediante el teatro, música o la mera colocación de carteles trasmitir unas ideas en la sociedad. Para llevar a cabo aquellas técnicas necesitaban suficiente tiempo para poder elaborarlas, tiempo que hoy en día los equipos de comunicación no disponen. Las diferencias entre la agitprop y TikTok son evidentes (formas, canal, etc.), pero el objetivo es el mismo: persuadir al remitente y la colocación de mensajes en la sociedad.
Firma invitada - Aritz Santamaria es periodista por la UPV/EHU y con máster en Comunicación y Marketing Político. Muestra especial interés por la política en todas sus vertientes, pero, en especial en dos ámbitos: por un lado, la comunicación política, y por otro lado, la política internacional.
Aquellos interesados que cuenten con una perspectiva politológica o sociológica y quieran colaborar en esta newsletter con la publicación de artículos relacionados con la actualidad política, pueden ponerse en contacto con nuestro equipo: politicxcontacto@gmail.com.
Muy interesante.
Yo matizaría que el agitprop se valió del teatro y otros medios, pero tanto el teatro como otros medios ya habían sido usado antes en la historia como mecanismos propagandísticos de corte político. En el caso del teatro, existen ejemplos desde la Antigua Grecia. El gran logro del agitprop en la Unión Soviética, desde mi punto de vista, fue sin duda la alfabetización de la población. La idea de crear una red de aprendizaje que se asegurara que todo individuo sabía escribir y, sobre todo, leer fue esencial para que se pudiera promulgar de forma más efectiva todos los preceptos del Partido Comunista.