¿Es Feijóo un mal presidente para el PP?
Análisis con datos del primer año de mandato de Alberto Núñez Feijóo como líder del Partido Popular frente a sus predecesores.
Se cumple un año desde que el 2 de abril de 2022 Alberto Núñez Feijóo fuese proclamado líder del Partido Popular después de la caída abrupta de Pablo Casado. Como tal, ha tenido la importante función de encabezar la oposición contra el Gobierno de Pedro Sánchez y de representar una alternativa a éste.
Varios han sido los análisis que han destacado su caída en la valoración pero, ¿es esta tan preocupante si se compara con los líderes anteriores del partido? Y, entre los diferentes votantes, ¿es Feijóo un mejor activo que sus predecesores?
Un año de caída libre
Si se atiende a la valoración que obtiene Feijóo tanto en el electorado de derechas como del PSOE, se puede advertir una bajada bastante notable. En el primer mes de su mandato, abril de 2022, el líder del PP consiguió una valoración superior a 5 entre todos los encuestados del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).
Sin embargo, en los meses posteriores comienza una caída a diferentes velocidades. La más acelerada se da entre los votantes del PSOE, pasando del aprobado a una valoración de 3,9 en el mes de marzo de 2023. Entre los votantes de Vox se da el mismo patrón (aunque con una caída más pausada), pasando de 5,6 al 4,9 en el último mes. Por último, entre los propios votantes del PP, la valoración empieza a reducirse a partir del mes de noviembre de 2022 llegando a un 6,7 en la actualidad.
Las razones de esto pueden ser variadas. Por un lado, el PSOE ha desplegado una estrategia de confrontación directa contra el líder del PP que ha podido ir haciendo mella en la percepción entre sus propios votantes. Pedro Sánchez, en concreto, siempre tiene preparada una batería de críticas para Feijóo aunque este no se encuentre en el Congreso, como se pudo ver en la moción de censura presentada por Vox.
Por otro lado, la puesta en escena del liderazgo de Feijóo ha tropezado con diferentes polémicas generadas por sus discursos. Alguna de las más sonadas se dio con la frase: “Deje de molestar a la gente de bien”, que pronunció Feijóo en el Senado sobre la ley trans aprobada por el Gobierno. Esto junto a otras equivocaciones que hacen recordar al expresidente Mariano Rajoy ha podido empeorar la percepción que tienen de él.
Los predecesores de Feijóo
Si comparamos a Feijóo con sus predecesores se destaca como este es el que obtiene en el primer año de mandato la valoración media más alta, seguido por Aznar y Rajoy. Además, consigue una valoración mucho más positiva que la que obtuvo Pablo Casado, siendo este el líder peor valorado de la historia del PP.
Aun así, Feijóo es el líder que ha experimentado una bajada más drástica en su valoración en el primer año, mientras que sus predecesores, a pesar de subidas y bajadas puntuales, obtienen puntuaciones mucho más cercanas al momento de ascenso al liderazgo del partido.
¿Es realmente un activo para el PP?
Si comparamos la valoración que obtuvieron los líderes históricos del PP en su primer año con la que obtiene Feijóo entre los votantes del PSOE, se puede observar cómo este último es el que mejor nota consigue. Aún con la bajada, Feijóo se consigue mantener como el líder que mejor valoración obtiene entre los votantes socialistas, uno de los caladeros de voto más importantes que tiene el PP. Sin embargo, si observamos al votante del PP, los resultados son muy diferentes.
Los datos del Gráfico 4 son mucho más alarmantes para el actual líder del partido que, lejos de ser el mejor valorado, se acerca mucho a la posición más baja del ranking.
Mientras que Feijóo empeora la percepción entre los votantes del PP, José María Aznar en el mismo periodo de tiempo consigue afianzarse y mejorar su valoración. Pablo Casado, por su parte, a pesar de ser el líder peor valorado a nivel general, entre sus propios votantes logra una tendencia ascendente. En cambio, Feijóo experimenta una caída notable desde el mes de noviembre de 2022 que se mantiene hasta la actualidad.
Moderación o derechización
Este último hecho mencionado es quizás solo un reflejo de la dicotomía en la que se la que se encuentra encerrado el PP desde la irrupción de Vox, moderación o derechización. Feijóo parece haber hecho una apuesta por los temas económicos, lo que podría acercarle hacia posiciones más moderadas haciendo que el votante socialista no le valore de forma tan negativa como a sus predecesores.
No obstante, a nivel interno, Feijóo puede no estar consiguiendo la cohesión deseada por varias razones. Una de ellas es que, mientras el presidente del PP intenta aparentar moderación evitando temas culturales, Isabel Díaz Ayuso sigue marcando la línea más dura del partido al confrontar directamente con Pedro Sánchez. A parte de que esta estrategia pueda funcionar mejor o peor para Ayuso, lo cierto es que puede estar perjudicando a Feijóo, ya que salta por encima de su figura como jefe de la oposición.
Unido a los deslices que tiene en sus discursos, esto puede haber hecho que el efecto halo del que disfrutaba el presidente del PP en un principio se haya esfumado rápidamente. Así, Feijóo, parece no contentar del todo a unos y a otros, empeorando por un lado su valoración entre los socialistas, y entre los votantes del PP por el otro siendo relegado a una tercera posición frente a sus predecesores.
Por lo tanto, aunque no sea un mal presidente para el PP en términos históricos, parece que la figura de Alberto Núñez Feijóo podría empezar a ser cuestionada internamente, como le sucedió a Pablo Casado. Sin embargo, aún es pronto para darle por vencido, puesto que la auténtica prueba de fuego se encontrará en el corto plazo con las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo y, en el medio plazo, con las elecciones generales.